Después del terremoto...

Hasta que se dio la lógica. Siempre sostuve que los medios de comunicación se equivocaban al mostrar lo negativo de las personas que saqueaban y robaban a destajo aprovechándose de las circunstancias, más de alguien lo calificó como de manipulación de la pobreza. El equívoco consistía en que mostraban esa cara de la sociedad y de unos cuantos que se dedicaban al pillaje, siendo que la noticia estaba en otra parte, en los que sufren, en los que perdieron todo y más aún, la noticia estaba en aquellos que se pusieron de pie, se sonaron las lágrimas con las mangas de su camisa y se dispusieron a hacerle frente a la adversidad, la noticia estaba en las comunidades que se organizaron para ir en su propia ayuda y con su propias manos, allí donde radica la fuerza, con sus propias manos se dieron a la tarea de la reconstrucción y recuperación de lo que les pertenece, de lo que les quedó y con el empujón que le dieron otros tantos millones de solidarios jóvenes, viejos, autoridades o no,comunidad organizada que se dieron las manos, compartieron una sonrisa, consolaron una pena, intercambiaron vivencias y manos a la obra.
No había tiempo para tanto lamento, era más urgente vivir, buscar las formas de paliar el daño que la naturaleza había causado. Alguien dijo;"lo que le hagas a la Tierra, la Tierra te lo hará a ti..." más de alguien ayudó a que la naturaleza reaccionara de esa manera, claro que no tienen porqué pagar los inocentes, aunque la inocencia es entre comillas porqué más de una vez también contaminaron, pasaron por alto el respeto al medio ambiente, en menor o mayor medida, y allí está nuestra respuesta, la liberación de energías del interior del planeta para hacernos sentir que no somos dueño de la Tierra, sino que el hombre pertenece a la Tierra.
La vida nos da sorpresas, entre tanto buscar responsabilidades y explicaciones para tanto dolor, se gatillan los sentimientos solidarios, se crea una suerte de Teletón que dobla la meta propuesta y para colmo, aquellos "malandras de ocasión" devuelven lo robado para quedar en paz con su conciencia y seguir siendo pilares morales para su familia y sus hijos principalmente que les cuesta tanto asimilar tanta experiencia junta y en tan poco tiempo.
En tanto las organizaciones formales como _Bomberos, Cruz Roja, Hogar de Cristo, Estudiantes, Sindicatos, Gremios se pusieron en forma inmediata al servicio de sus semejantes, sin espera una lente de la TV que los anuncie o lo ensalce en lo que ellos creen su obligación... estar allí, "donde las papas queman"... Es te es el Chile que hay que mostrar, este chileno sin lágrimas, este chileno arremangado, con bototos y dispuesto ponerle la proa al destino, a la señora que prepara un fondo de porotos, la que reúne a los cabros chicos alrededor de una ronda para que se abstraigan de su desgracia, ese el el Chile que me gusta, cuánto lamento no poder haber estado allí...pero, mi hijo, César, rescatista del Cuerpo de Bomberos de Caldera, si tuvo esa oportunidad.